Abogados de instituciones públicas y privadas, así como en el libre ejercicio profesional, continúan preparándose para la aplicación del Código Orgánico General de Procesos (COGEP). Este 21 de enero, la Escuela de la Función Judicial del Consejo de la Judicatura (CJ), organizó la conferencia magistral “El abogado como vector de la innovación: la administración de justicia en el siglo XXI”, impartida por el experto español Pablo Sánchez Chillón.
La inauguración del evento, que contó con la participación de cientos de profesionales del Derecho, estuvo a cargo del vocal del CJ, Néstor Arbito, quien expuso los cambios trascendentales del COGEP. Destacó la importancia de que los abogados se formen en litigación oral y señaló que el juez debe resolver con base en el debate y la contradicción que se den en las audiencias.
Recordó que, tras la publicación del COGEP en el Registro Oficial, se implementaron nuevos sistemas que fortalecen la transparencia en la administración de justicia. Este es el caso de los remates judiciales vía web, en vigencia desde el pasado 23 de noviembre.
Hasta el momento, hay 25 procesos publicados en la página web. De ellos, uno se ejecutó en Guayaquil y otro se suspendió porque el deudor pagó toda la querencia. “Hemos tenido cerca de 35 mil visitas a la página web”, manifestó el vocal Arbito.
Por su parte, Pablo Sánchez Chillón se refirió al nuevo rol del abogado con la aplicación del COGEP. “La entrada en vigor de la oralidad implica retos muy interesantes para los profesionales del Derecho en temas de liderazgo, inmediatez, comunicación y habilidades verbales”, dijo y añadió que esto permitirá que el sistema judicial tenga un mejor desempeño.
Según el jurista español, la oralidad responde a un cambio de paradigma que acerca la justicia al ciudadano, le da la posibilidad de conocer, de primera mano, cómo se resuelve un tema de interés en el que interviene y además, le permite reconocer las habilidades y facultades de su defensor y de los jueces.
Finalmente, recalcó la importancia de este tipo de capacitaciones para los abogados en libre ejercicio. “Esta es una profesión que puede ser realmente un vector de innovación y que tiene que ser parte de esos procesos de transformación de la sociedad. Ecuador apuesta por el emprendimiento y creo que los profesionales del Derecho no pueden quedarse atrás”, manifestó.
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